La protagonista, Annika Kaunda, es una joven de origen africano, policía en la comisaría de Mérida y especialista en temas de violencia de género.
Una joven aparece asesinada salvajemente en su casa y todo apunta a que lo ha hecho su pareja., pero Annika no lo ve tan claro y, en contra de la opinión del mezquino de su jefe, empieza a investigar por su cuenta.
Empieza a indagar en el círculo de amistades de la joven asesinada y en su entorno laboral, una empresa farmacéutica y, según va investigando, el novio le parece cada vez más inocente.
Además, ya estaba investigando el tráfico ilegal de mujeres, para lo que pide ayuda a su amigo Bruno, un joven periodista en paro.
La autora ha querido hacer demasiadas denuncias en un solo libro(el mercado negro, la memoria histórica, la violencia machista,...) y no ha abordado en serio ninguno.
También el final me ha parecido muy forzado para intentar encajar todas las piezas de la historia.
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