Lúdovic, un cinéfilo aficionado, se hace con unas películas antiguas muy codiciadas por él. Al visionar una de ellas se queda ciego.
Llama a su antigua amante, Lucie, teniente de la policía de Lille, en demanda de ayuda.
Por otro lado, a trescientos kilómetros de distancia, la aparición de cuatro cadáveres terriblemente mutilados, hace que sea solicitada la reincorporación al cuerpo del comisario Franck Sharko, de la policía criminal.
Una misteriosa llamada que recibe Lucie relaciona los dos casos y así empieza esta trepidante y emocionante novela en la que los dos policías, primero por separado y luego juntos, van descubriendo horror tras horror.
Interesante de principio a fin. Y muy bien documentada.